Comprar dólares es algo cotidiano en la vida de los argentinos, sin embargo el precio al que se accede puede variar considerablemente dependiendo a través de qué medio se los adquiera.
La forma más conocida para hacerse de la divisa estadounidense siempre ha sido por medio de los bancos, los cuales concentran la mayor cantidad de operaciones de compra y venta. Desafortunadamente para los ahorristas, ninguno de ellos ofrece precios muy competitivos ya que tienen un alto spread cambiario.
¿Qué es el spread?
Básicamente, es la diferencia que existe entre el precio de compra y el precio de venta de cualquier moneda, en este caso, el dólar.
¿Qué implica que haya un alto spread?
Que cuanto mayor sea esta diferencia, mayor será el costo que deberá afrontar el comprador o el vendedor. Lo curioso en todos estos casos es que tanto los bancos como las agencias y casas de cambio dicen tener comisión cero, al no cobrar un costo adicional explícito para la compra-venta de dólares.
La provisión de dólares y otras divisas funciona de forma oligopólica, esta es una situación en la cual existen pocos proveedores de un bien o servicio, las barreras de entrada al mercado son altas y como consecuencia los precios que deben afrontar los consumidores son más altos que los que habría en un mercado competitivo. En el caso particular de la compra-venta de dólares en Argentina, la cantidad de proveedores oficiales puede no ser baja, ya que hay 281 instituciones financieras y operadores de cambio registrados en el país, pero más del 90% de las transacciones se concentran en sólo 14 instituciones financieras.
Hasta hace no mucho tiempo, las alternativas para comprar dólares a un precio competitivo eran limitadas, por no decir nulas. Hoy en día, gracias a una flexibilización de las regulaciones en el mercado cambiario introducida por el Banco Central de la República Argentina se abrió el camino para que aparecieran nuevos jugadores con propuestas mejores y más innovadoras.
De la mano de las Fintech se generó el desarrollo de nuevas plataformas digitales para la compra y venta de dólares. Estas plataformas permiten acceder a dólares a un precio más económico y de manera segura y más rápida. Desde la comodidad de su casa o desde el trabajo, los usuarios pueden registrarse y en cuestión de minutos estar operando a precios considerablemente más competitivos.
A modo de ejemplo, si tomamos como referencia las cifras informadas por el Banco Central para el año 2018, las personas humanas y las empresas del sector no agropecuario demandaron en su conjunto un total de US$17,800 millones. Por ende, durante 2018, éstos últimos gastaron en promedio un total de US$890 millones de más como resultado de un mayor spread.
Las propuestas digitales de las empresas Fintech están en auge y continúan desarrollando nuevas soluciones en sus plataformas para captar una mayor base de clientes. El principal desafío que enfrentan es romper con las costumbres de los usuarios que hace años que se manejan utilizando los bancos y son reticentes a migrar hacia un nuevo servicio. De todas formas, la propuesta de valor es clara, un servicio seguro, cómodo, y por sobre todo más competitivo, mediante el cual los usuarios pueden comprar y vender dólares en cuestión de minutos y darle un mayor rendimiento a sus ingresos o ahorros.
«La realidad es que las comisiones existen, son altas y se encuentran ocultas dentro del spread. “Comisión 0%” es un slogan que no es real. La dinámica es muy sencilla, se compra caro y se vende barato, la diferencia es la comisión. El spread ronda en promedio en un 5% y puede llegar a ser tan alto como un 7%, de todas formas hay muchas personas que no están al tanto de que están pagando estos altos costos cada vez que compran o venden cualquier moneda».
Una de las fintech que está dando que hablar es Buendolar, ya que es una plataforma que opera sin spread y con una comisión de apenas el 0,5% del total por cambio, permite comprar y vender dólares hasta 5 veces más barato que los bancos y otras casas de cambio.
¿Ya compraste o vendiste dólares a través de Buendolar?